El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó este miércoles por unanimidad una resolución propuesta por Estados Unidos que facilita la ayuda humanitaria por un año a Afganistán, que se encuentra al borde de una crisis económica, esperando que los talibanes no salgan beneficiados.
La resolución establece que “el pago de fondos” y “el suministro de bienes y servicios necesarios” para responder a las “necesidades humanas fundamentales en Afganistán”, sean “autorizados” y “no constituyan una violación” a las sanciones impuestas a entidades relacionadas con los talibanes.
Su adopción representa un primer paso de la ONU hacia Afganistán, dirigido desde agosto por los talibanes, cuyo régimen no ha sido reconocido por la comunidad internacional.
Busca reducir el riesgo de que un fuerte flujo de refugiados pueda huir de la pobreza hacia los países vecinos y responder a una necesidad de asistencia creciente, según Estados Unidos.
Contrario a una versión anterior del texto que preveía excepciones a las sanciones limitadas a cada caso -rechazada el lunes por China-, la resolución adoptada cubre la entrega de ayuda humanitaria en un sentido más amplio.
Para intentar garantizar que la ayuda vaya a los afganos y que no se beneficien los talibanes, la resolución prevé una revisión de la excepción general vinculada a la ayuda humanitaria en un año.
La resolución “motiva fuertemente a los suministradores” de ayuda humanitaria a “minimizar toda ventaja” directa o indirecta que puedan obtener personas o entidades objeto de sanciones internacionales.
El texto también incluye un control del destino de las ayudas en los dos meses siguientes a su distribución, así como un informe de la ONU sobre el funcionamiento de la asistencia cada seis meses.
AFP