Silvia es una mujer de la tercera edad que el 1 de junio recibió la primera dosis de Sputnik V. Ese día un funcionario sanitario anotó en su tarjeta de vacunación que debía volver 21 días después para aplicarse la segunda dosis. Cuando regresó, sin más detalles, le dijeron que los fármacos no habían llegado.
Por VOA
Al no encontrar manera de tener información oficial, desde entonces, prácticamente a diario, Silvia escribe en el grupo vecinal de WhatsApp del que forma parte, pidiendo que le hagan saber si “llegan a enterarse” sobre la llegada de las vacunas a Venezuela.
El Centro Gamaleya, desarrollador de la vacuna Sputnik V contra el Covid-19, amplió a 90 días el período de administración del segundo componente, pero el paso de los días y la ausencia de noticias sobre la llegada de nuevos cargamentos, empieza a incrementar la preocupación no sólo de Silvia, sino de muchas de las aproximadamente 600.000 personas, que, según estimaciones de expertos, esperan por segunda dosis.
La escasez de segundas dosis de Sputnik V no impacta solo a Venezuela, varios países que firmaron contrato para adquirirlas también están a la espera.
A inicios de agosto el equipo de Sputnik V divulgó un comunicado en el que aseguró que este mes espera resolver los retrasos que se han presentado con el segundo componente de la vacuna y que han establecido acuerdos de producción con 14 países para duplicar la capacidad en septiembre.
“La demanda mundial de Sputnik V sigue siendo muy alta debido a su eficacia y seguridad excepcionales, así como a la ausencia de efectos secundarios graves que se han relacionado con el uso de algunas otras vacunas”, agregó el texto.
Para aclarar algunas de las dudas más frecuentes, VOA consultó a los especialistas Manuel Figuera Esparza, vicepresidente de la Sociedad Venezolana de Infectología y al presidente de la Sociedad Venezolana de Pediatría, filial Aragua, Alejandro Crespo.
Ambos coinciden en la necesidad de que el régimen de Maduro se pronuncie y oriente a la población que se encuentra ávida de información. Además, recomiendan a los ciudadanos “no desesperarse” y continuar tomando medidas como lavado de manos, uso de mascarillas y mantener distanciamiento físico.
¿Cuál es el porcentaje de protección con una sola dosis de Sputnik V?
Para los médicos, la información no es fidedigna hasta tanto no esté publicada en revistas de alto impacto, donde se aprecian “datos verificables y auditables”, explica Crespo. Al respecto destaca que hasta el momento lo único publicado en “The Lancet” sobre Sputnik V es un estudio sobre la eficacia de ambas dosis.
El médico pediatra sostiene -citando datos del Ministerio de Salud de Argentina- que una dosis de Sputnik V tiene una efectividad muy similar a una dosis de la vacuna de Johnson & Johnson en conjunto con Janssen, la cual es de alrededor del 76% para prevenir enfermedad y alrededor del 86% para prevenir enfermedad grave y muerte. Sin embargo, subraya que no son datos auditables.
“Pareciera que hay una buena protección con una dosis de Sputnik, pero no en el contexto de la variante delta que ha venido a cambiar todos los preceptos que teníamos hasta ahora”, añade.
¿Qué ocurre si no llega la segunda dosis de Sputnik V en 3 meses?
Crespo subraya que lo importante es que las personas sepan que las vacunas no pierden su efecto ni que se van a “vencer”, pues se continúa manteniendo respuesta inmunológica.
“Definitivamente la protección que usted tiene con una dosis es mayor que con ninguna dosis, pero por supuesto que es menor al esquema como corresponde, con sus dos dosis, pero en algún momento usted podrá retomar su esquema”, dijo.
Figuera Esparza sostiene que en Bolivia comenzaron a vacunar con segundas dosis y desconoce cuál es el panorama en Venezuela.
“Sería bueno que las autoridades buscaran aclarar si es que va a llegar pronto, si ellos tienen comunicaciones con el Estado ruso para saber si van a llegar pronto como están llegando a otros países”, manifestó.
¿Puedo combinar la primera dosis de Sputnik V con Sinopharm?
“No hay estudios (…) publicados. Ya hay países que iniciaron ensayos clínicos con las otras vacunas disponibles y cuando los datos estén publicados se podrán discutir. Venezuela no es el único país del mundo que está teniendo problemas con Sputnik, hay 67 países a los que Gamaleya no le ha cumplido”, explica Crespo.
“La recomendación a la gente no puede ser que vaya libremente a ensayar. Por lo pronto tienen que estar tranquilos porque tienen un grado de protección y hay que continuar exigiendo segundas dosis y vacunas para todos”, agregó.
Figuera Esparza reitera que no hay evidencia científica para combinar Sputnik V con Sinopharm, la otra vacuna disponible en el país, e insistió en la necesidad de que se hagan estudios porque “es la única manera de tener la seguridad de lo que estamos haciendo lo adecuado”.
“Experimentar esquemas sin respaldo científico lo que puede es traer problemas nuevos. Imagínate que la gente empiece a vacunarse sin ningún tipo de respaldo con Sinopharm porque están angustiados por no recibir la segunda dosis de Sputnik V, le estamos quitando esa vacuna a personas que todavía no están vacunadas”, advierte.
Opacidad
Nicolás Maduro reportó el 25 de julio que 3.612.473 personas habían sido vacunadas contra el Covid-19, lo que representaría el 12% de la vacunación. Sin embargo, no hubo precisión sobre el número de personas que recibieron primera y segunda dosis.
De acuerdo a Transparencia Venezuela, públicamente al país ha llegado un total de 3.230.000 dosis de vacunas entre Sinopharm y Sputnik V “las cuales alcanzan para completar el esquema de vacunación de 1.615.000 personas” y se desconoce si han arribado otros cargamentos.
Agrega Transparencia Internacional que, de forma publica, han arribado 1.430.000 dosis de Sputnik, pero no hay datos de cuantas corresponden a primera o segunda dosis.
En diciembre, Rusia y Venezuela firmaron un contrato para la adquisición de 10 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik V y, el último cargamento del que se tiene conocimiento llegó a través del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar el pasado 12 de junio.
La semana pasada, Ciro Ugarte, director de Emergencias en Salud de la Organización Panamericana de la Salud dijo que, a través del mecanismo COVAX, entre agosto y septiembre está previsto el envío a Venezuela de unas 2,6 millones de dosis de la vacuna Sinopharm y aproximadamente 600.000 de Sinovac.
En varias ocasiones el régimen de Maduro ha insistido en que ha enfrentado dificultades para adquirir vacunas como consecuencia de las sanciones impuestas por la comunidad internacional.
Distintos sectores han cuestionado el “silencio” por parte del régimen sobre el retraso de las vacunas rusas y exigen mayor transparencia sobre el proceso de vacunación en el país.
“Maduro es muy contundente a la hora de emplazar a quienes dirigen el sistema COVAX, pero no se le observa la más mínima intención de hacer lo mismo con el gobierno ruso”, dijo el martes el diputado Rafael Veloz durante una sesión de la Comisión Delegada del Parlamento de 2015.