Miles de cubanos salieron a las calles este domingo en varias poblaciones de la isla para protestar contra el Gobierno al grito de “¡libertad!”, en una jornada inédita que se saldó con cientos de detenidos y enfrentamientos después de que el presidente Miguel Díaz-Canel conminara a sus partidarios a salir a enfrentar a los manifestantes.
UN NUEVO “MALECONAZO”
Las protestas, las más fuertes que han ocurrido en Cuba desde el llamado “maleconazo” de agosto de 1994, se producen con el país sumido en una grave crisis económica y sanitaria, con la pandemia fuera de control y una fuerte escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos, además de largos cortes de electricidad.
Los sucesos llegan después de que en los últimos días haya ganado visibilidad internacional la campaña “SOS Cuba”, lanzada por la sociedad civil debido a la crisis galopante, el desabastecimiento de medicinas y a la situación crítica debido a la pandemia en la provincia de Matanzas.
La congresista republicana por Florida María Elvira Salazar indicó que, después del llamado “maleconazo” en 1994, no se habían visto en Cuba protestas populares como estas, que pudieran ser “el principio del fin” del régimen comunista, en el poder desde enero de 1959.
Los líderes del exilio, agrupados en la Asamblea de la Resistencia Cubana, subrayaron que la salida del régimen castrista “no es negociable” y pidieron al pueblo cubano que siga en las calles porque es la única manera de conseguir su propósito.
Con información de EFE