La vicepresidenta y canciller colombiana, Marta Lucía Ramírez, dijo en entrevista a la Voz de América que la política de la Casa Blanca frente a la crisis venezolana jamás atentaría contra los intereses colombianos y la catalogó de “constructiva” para ambos lados.
Por Voz de América
Enfatizó en la importancia geopolítica de Colombia en la región y recordó que el Gobierno del país sudamericano ha reiterado su apoyo al líder opositor Juan Guaidó, también respaldado por el gobierno de Estados Unidos y decenas de países.
“Yo creo que la presidencia Biden – Harris jamás haría algo que vaya a desafiar precisamente a Colombia. Lo que creemos es que lo que hacen ellos lo hacen constructivamente, entendiendo la importancia que tiene Colombia dentro de este hemisferio, como el principal aliado que tiene Estados Unidos en defensa de la democracia, en defensa de las libertades, en defensa de la iniciativa privada y el desarrollo económico que genera empleos”, dijo Ramírez a la VOA.
La canciller apoyó la estrategia actual de la Casa Blanca, cuando explicó: “[Que estén] explorando distintas opciones con la oposición venezolana, para que haya una verdadera transición hacia la democracia, nos parece que es positivo”.
Afirmó además que el Gobierno de Iván Duque apoya toda acción que conduzca a lo que llama “el fin de la dictadura”, refiriéndose al Gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Consultada acerca de si el Gobierno colombiano entablaría o no un diálogo con el mandatario, expresó que siguen viendo su administración como “una dictadura”, por lo que en ese sentido no ve claramente la salida hacia esa transición democrática.
Aseguró que por lo pronto están “observando y escuchando” consultas que han hecho “distintos actores”.
“A todo ese tipo de consultas hemos dicho: ‘Lo que conduzca a la democracia venezolana es una muy buena noticia para Colombia y lo apoyaremos’”, expresó la canciller.
Ramírez reiteró también el apoyo al líder opositor Juan Guaidó, sobre la base estipulada por la Constitución venezolana. Sobre el diálogo interno con Maduro dijo que es una buen opción si es para “concluir con la dictadura y abrir paso, de verdad, en un corto plazo a la democracia”.
Crisis en Colombia
La vicepresidenta también se refirió a la crisis interna que vive su país, a raíz de las protestas de más de dos meses que han dejado víctimas fatales y alertado a la comunidad internacional por denuncias sobre exceso de la fuerza por parte de los agentes del orden del Estado.
Ramírez lamentó en conversación con la VOA las muertes y aclaró que los organismos de control han señalado que buena parte de los fallecidos durante este contexto no tienen relación con las protestas y que las autoridades están adelantando las respectivas investigaciones para responsabilizar a los autores de los hechos.
Por otro lado, enfatizó en que el descontento social se ha generado a raíz de los efectos de la pandemia y la crisis económica que esta ha generado.
Señaló además que esta situación se ha agravado en el plano social porque Colombia se encuentra en medio de una campaña política, a propósito de las elecciones presidenciales del próximo año.
“Hay algunos actores que obviamente en un momento de tanto descontento han querido canalizar todo ese descontento en contra del Gobierno”, expuso.
“Responsabilizar a un gobierno por lo que ha sucedido una pandemia es totalmente injusto”, agregó la vicepresidenta de Colombia, al tiempo que manifestó que el Gobierno ha seguido dando todas las ayudas posibles y trabajando en un programa de reactivación de la economía.
Reconocimientos y desacuerdos
A raíz de las denuncias de excesos por parte de la policía, la CIDH adelantó una visita el mes pasado y el miércoles hizo público un informe en el que constata “respuesta desproporcionada de la fuerza” del Estado colombiano en el Paro Nacional.
“[El Gobierno] le ha apostado a fondo a la defensa, a la protección y a la promoción de los derechos humanos. Colombia es un país que ha sido muy activo en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, dijo la funcionaria.
Resaltó “el trabajo constructivo con la CIDH”, pero adelantó que no todas las recomendaciones será acatadas por el Gobierno. “Son recomendaciones que recibimos respetuosamente, pero que no necesariamente obligan al gobierno”.
Citó, por ejemplo, la instalación de un Mecanismo Especial de Seguimiento en Materia de Derechos Humanos, que la canciller lo considera innecesario: “Es un mecanismo de ellos, individual, autónomo, que no vincula al Estado colombiano”.
La seguridad interna
En meses recientes se han reportado dos actos terroristas, uno contra la base militar en Cúcuta y otro contra el presidente Iván Duque que preocupan a Colombia y a la región.
Sobre si se evidencia un deterioro de la seguridad en el país, la canciller confesó que “cuando hay narcotráfico, hay inseguridad” y que esa fue una de las razones “por las cuales siempre fuimos tan críticos realmente de que no haya habido compromisos de verdad contundentes frente a la terminación del narcotráfico, por ejemplo, cuando se hizo el acuerdo con las FARC”.
Al respecto, dijo, se están mejorando las condiciones de seguridad y las acciones para combatir el narcotráfico.
“Las mafias del narcotráfico, la gente que en las zonas cocaleras termina matando a un campesino que quiere es ser parte de los programas de erradicación de drogas simplemente porque los campesinos se oponen a la erradicación”, agregó.
Pero resaltó que su país cuenta ahora con menor número de homicidios anual y de secuestros.