El príncipe Harry y Meghan Markle anunciaron este domingo el nacimiento de su hija Lilibeth “Lili” Diana Mountbatten-Windsor.
La niña, que pesó 7 libras y 11 onzas, nació el pasado viernes 4 de junio en el Santa Barbara Cottage Hospital en Santa Bárbara, California, Estados Unidos.
“Tanto la madre como la bebé están sanos y bien, y se están instalando en casa”, señalaron en un comunicado emitido por la secretaría de prensa de la pareja.
La pequeña Lili lleva el nombre de su bisabuela, la reina Isabel II, cuyo apodo familiar es Lilibet. Su segundo nombre, fue elegido en memoria a la difunta Diana, princesa de Gales, y madre del príncipe.
Lilibet Diana es el segundo hijo de la pareja, que también tiene un niño, Archie Harrison Mountbatten-Windsor, de 2 años de edad.
“Ella es más de lo que podríamos haber imaginado, y estamos agradecidos por el amor y las oraciones que hemos recibido desde todo el mundo. Gracias por su continua amabilidad y apoyo durante este momento tan especial para nuestra familia”, concluyeron los duques de Sussex.
Hasta los momentos, la pareja ha decidido no compartir la primera foto de la pequeña Lili.
La bebé recién nacida es el undécimo bisnieto de la reina Isabel II y es la octava en la fila de sucesión al trono por detrás de su abuelo, Carlos, su tío William, duque de Cambridge, sus primos George, Charlotte y Louis, su padre Harry y su hermano mayor, Archie.
La pequeña Lili no necesitará permiso de la Reina para casarse. Durante años, la Ley de Matrimonio Reales de 1772 obligaba a los descendientes de Jorge II a pedir el consentimiento del soberano antes de la boda, de lo contrario la unión no tenía validez.
Dicha ley fue derogada en 2013.
El nacimiento de la segunda hija de los duques se produce luego de la explosiva entrevista con Oprah Winfrey en marzo, en la que la pareja expuso las discusiones sobre el color de piel de Archie, la pérdida de protección real y las presiones que llevaron a contemplar un posible suicidio por parte de la exactriz de Suites.
Además, el pasado mes de julio, la duquesa de Sussex reveló que había sufrido un aborto espontáneo.
Harry y Meghan Markle se casaron en el castillo de Windsor en mayo de 2018. Un año después, anunciaron la llegada de su hijo Archie.
A principios de 2020, ambos anunciaron que dejaban sus funciones reales para mudarse a Estados Unidos, a causa de las intromisiones y actitudes racistas por parte de los medios de comunicación británicos.
Desde entonces, residen en Montecito, California.
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