Eran las 5:00 de la tarde del lunes 28 de noviembre y Leosmar Perozo esperaba ansiosa, junto a un grupo de amigos, a que iniciara una de las conferencias programadas en el primer día del Hesperia WTC Valencia Fashion Week.
Por Rosimar Sánchez / Corresponsalía Carabobo
Expresó sentirse emocionada, porque estaba a pocos minutos de escuchar y aprender de referentes del ámbito de la moda, un tema que le ha apasionado desde que era adolescente.
Señaló que a sus 20 años de edad no había tenido la oportunidad de asistir a grandes eventos de la moda, por lo que destacó la importancia de que se realicen este tipo de actividades, que incluyen espacios de formación gratuitos para los nuevos talentos.
“Me interesó este mundo, porque a los 14 años estaba curioseando en Instagram y encontré una cuenta de una chica de Valencia que se enfocaba en el marketing, modelaje, moda, y comencé a indagar porque me interesaba muchísimo el contenido. Dos años después, en mi colegio nos hablaban de este tipo de eventos y me interesó saber cómo funcionaba el mundo de la moda, la industria, colorimetría, logotipos, este tipo de cosas de diseño. Estoy muy interesada en aprender muchísimo más cada día y espero poder estudiar”, recalcó Perozo.
La modelo valenciana Romina Palmisano, presidenta y fundadora de la organización Hesperia WTC Valencia Fashion Week, fue tajante: su meta es convertir la ciudad en la “capital de la moda dentro del país”.
Reconoció que cumplir con el objetivo tomará tiempo, debido a que el movimiento de la moda en Venezuela está reviviendo luego de muchos años en pausa, pero aseguró que con trabajo y preparación irán consolidando el concepto más internacional de una semana de moda.
Explicó que todavía no se puede hablar de una “industria de la moda en Venezuela”, porque es un movimiento que está dando sus primeros pasos.
Afirmó que hay mucho talento, pero hace falta capacitación. De allí su vehemencia en darle cabida a cinco días de conferencias y conversatorios en la Semana de la Moda, dictadas por especialistas en diferentes áreas para que todos los actores involucrados en ese mundo pudiesen adquirir herramientas y conocimientos que les permitan crecer.
“Es un tema que va desde la base. Hace falta muchísima formación, creo que tenemos que atacar desde lo más importante. Por eso mi insistencia en todo el tema de las conferencias y conversatorios, porque más allá de la parte mediática o el show que representa ver a los diseñadores y sus creaciones, lo importante es que la gente se prepare, que nuestros futuros diseñadores, costureras, sastres se preparen a través de estos incentivos de formación y por eso creo que esto es algo que va a tomar tiempo, pero estamos encaminados”, puntualizó Palmisano.
Movilizar la economía local
La modelo valenciana agregó que en esta segunda edición de la Semana de la Moda, celebrada del 28 de noviembre al 3 de diciembre, se activaron las Zonas de Moda en diferentes “puntos trendy” de la ciudad, como restaurantes, centros de entretenimiento, estéticas, donde se realizaron diversas actividades como una manera de activar la economía local.
Además, contó con una Expo Comercial, compuesta por más de 50 stands en un área del Hesperia WTC Valencia.
“En las semanas de la moda internacional, en las que he tenido la oportunidad de participar, la ciudad se viste de moda. Es importante que no solamente tengamos este espacio (Hesperia WTC Valencia) como protagonista, sino toda la ciudad, desde restaurantes, locaciones, estéticas de belleza, peluquerías, muchísimas empresas que nos están acompañando como puntos de moda y esto puedo decir que es parte de nuestras novedades”, comentó.
La primera edición de la Semana de la Moda en Carabobo se realizó el pasado mes de abril. Palmisano indicó que la apuesta es apegarse a la fórmula internacional y tener dos semanas de moda al año, con temporada primavera-verano y otoño-invierno.
El ingenio se impone frente a la crisis
Desde las 7:00 de la noche del jueves 1° de diciembre comenzaron a llegar los asistentes de la primera noche de pasarelas.
Estudiantes, diseñadores, modelos, maquilladores y estilistas se dieron cita en el Hotel Hesperia WTC Valencia, Carabobo.
“Soy diseñadora y me gusta mucho el enfoque que le están dando (a la Semana de la Moda), apostando mucho al país y al desarrollo de la moda, sobre todo aquí en Valencia. Es importante que se vean marcas nacionales y de diseñadores jóvenes, así como de diseñadores reconocidos”, dijo Valentina Daniel, asistente al evento.
A las 9:45 de la noche se encendieron las luces de la pasarela del Hesperia WTC Valencia Fashion Week, donde seis marcas mostraron sus diseños de línea playera.
Agua Bendita, Antigua Collection, Nicole Belleza, Moana, OED y Magnolia exhibieron sus creaciones de trajes de baño y ropa casual.
La diseñadora Daniela Peña, creadora de Magnolia, indicó que su propuesta de valor apuesta a una moda lenta, respetuosa y con calidad de exportación.
En su colección destacó el glamour y brillo, vestidos anchos, faldas y los colores rosado, morado y amarillo.
Mencionó que ser diseñadora en Venezuela implica enfrentarse a retos que van desde las carencias en formación, cultura de moda, hasta la dificultad para adquirir materia prima para la elaboración de las piezas.
“Al principio, el principal reto significó no tener las herramientas adecuadas. Yo empecé con la marca Magnolia hace seis años y en ese momento yo no había estudiado diseño de moda. Por eso también hago mucho énfasis en que tenemos que prepararnos y estudiar (…) Luego de graduarme como diseñadora en 2020, comienzaron otros retos, pues yo quería tener un producto con calidad perfecta y me encontraba con que en el país eran altísimos los precios de la materia prima, y es ahí donde tomo la decisión de salir a buscar nuevos horizontes y buscar una materia prima con otros estándares de calidad. Entonces es donde consigo y empiezo a importar toda mi materia prima. Ya tengo un producto hecho en Venezuela, pero con materia prima importada”, comentó Peña.
La noche del viernes 2 de diciembre tomaron la pasarela las marcas Cubel, Moss, Kosh, Gran Turismo y Covas, con diseños de ropa casual y calzado.
Humberto Cubides, diseñador colombiano y creador de la marca Cubel, explicó que las 28 prendas de su colección tienen una influencia artesanal, mostrando la parte ancestral de comunidades prehispánicas y están inspiradas en la cultura Quimbaya.
“El concepto de la marca es artesanía experimental, es un estilo urbano y vanguardista. Se utilizaron diferentes técnicas como bordados y tejidos. Lo que busco siempre es traer la parte espiritual. Por eso vemos colores terrenales”, mencionó.
Un cierre de lujo
El sábado 3 de diciembre, los diseños de Alejandro Fajardo, Giovanni Scutaro y Ángel Sánchez cautivaron al público valenciano que pudo apreciar prendas llenas de urbanismo, elegancia y feminidad.
Fajardo fue el encargado de abrir la pasarela con sus piezas vanguardistas, en las que destacaban prendas acolchadas en colores dorado, negro, plateado y marrón.
El diseñador valenciano mencionó que su objetivo es que el público se divierta al ver los diseños, así como él lo hace en su proceso creativo.
“Fue una aventura el traslado de esas piezas acolchadas, transformarlas y hacerlas de alta costura (…) Mi recomendación a los diseñadores es que no piensen qué van a mostrar, solo que se diviertan, que sean ellos mismos, que no le paren a lo que piensan los demás, sino que hagan lo que sienten y quieren”, expresó.
El segundo en mostrar su colección fue el reconocido diseñador Scutaro, quien emocionó a los asistentes con una cápsula de su colección otoño – invierno 2023 titulada “Amor, pasión y olé”, inspirada en España.
La pasarela estuvo marcada por prendas en tonos rojo y negro que desfilaban al ritmo del flamenco.
“Originalmente fueron 90 piezas. Para acá traje 60: 30 de caballeros y 30 de damas. Destacan los bordados, tejidos a mano, en los hombres se impuso el terciopelo. Y cerramos con la misa rociera típica española, donde la novia tiene un vestido con 800 cristales, va vestida con la mantilla y en vez de tiara, lleva el cintillo de una misa rociera”, comentó Scutaro.
Además, consideró que el Hesperia WTC Valencia Fashion Week le está dando la oportunidad a los nuevos talentos que quieren consolidarse en este movimiento, pese a las dificultades.
“Es una oportunidad para la nueva generación a esta Venezuela que dijo ‘estoy presente y quiero echar hacia adelante, no voy a depender de un Estado o país, voy a depender de mí mismo en plan de decir yo sí puedo’”, enfatizó Scutaro.
El consagrado diseñador Ángel Sánchez le puso punto final a las noches de pasarela, con su colección inspirada en las distintas personalidades de la mujer, que pasa por looks clásicos, modernos y atrevidos. Al finalizar, Romina Palmisano modeló un vestido negro, creado por Sánchez.
“Yo tenía 7 años sin venir a Venezuela. Tenía curiosidad de saber qué había ocurrido en esos años de ausencia y me encanta encontrar un momento de optimismo en este país en todos los sentidos. Debemos mantenerlo para mejorar todas las áreas creativas, de producción, económicas, de todo. Quedé muy feliz de haber estado acá”, señaló el diseñador radicado en Estados Unidos.
La presidenta y fundadora de la organización Hesperia WTC Valencia Fashion Week señaló que la idea es que eventos como este se repliquen en distintas ciudades del país, de manera que Venezuela pueda tener varias semanas de la moda.
“Para nadie es un secreto que crear dentro de este país y sacar adelante una marca de diseño o ser diseñador, es siempre cuesta arriba por los distintos obstáculos que tenemos que vivir a nivel económico y comercial. Yo pienso que todas las adversidades te retan más, entonces hay más pasión y entrega y, sin duda, el resultado habla por sí solo (…) Para mí la propuesta de valor como empresa es por el país, recuperar este movimiento de la moda y convertirlo en una industria como en algún momento fuimos”, subrayó Palmisano.
La próxima edición de la Semana de la Moda se realizará la primera semana de mayo de 2023.