El Gobierno de los talibanes anunció este miércoles que se reunirá con delegaciones de Estados Unidos y de la Unión Europea (UE) entre el 27 y el 29 de noviembre en Doha, donde tratarán que la comunidad internacional retire las sanciones económicas a Afganistán, que atraviesa una grave crisis humanitaria.
La delegación de los talibanes, encabezada por el ministro de Relaciones Exteriores, Amir Khan Muttaqi, contará también con representantes del sector educativo, salud, finanzas, seguridad y del Banco Central, afirmó el Gobierno islamista en un comunicado.
“Una delegación de alto nivel del (Gobierno afgano) visitará Doha del 27 al 29 de noviembre para discutir temas políticos, los activos congelados, la ayuda humanitaria, educación, salud, seguridad, reapertura de embajadas en Kabul (…) con representantes de la UE y de Estados Unidos”, detalló la nota.
El portavoz adjunto del Gobierno talibán, Enamullah Samangani, anotó en un comunicado remitido a Efe que es positivo proseguir con las conversaciones con EEUU, que se centrarán en “en tres grandes temas”: la implementación del acuerdo de Doha de 2020, descongelar los fondos que son necesarios para la economía de Afganistán, y preparar el terreno para mejorar las relaciones bilaterales.
El acuerdo de Doha firmado en febrero del año pasado entre EEUU y los talibanes fijó la retirada estadounidense de Afganistán, que se produjo finalmente poco antes de la medianoche del pasado 31 de agosto, quince días después de la entrada de los talibanes en Kabul.
El portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Ned Price, dijo también esta semana que el representante especial de Estados Unidos para Afganistán, Thomas West, se reuniría con los talibanes en Doha, donde tratarán temas “vitales de interés nacional”.
“Eso incluye el contraterrorismo, incluye el paso seguro para los ciudadanos estadounidenses y para los afganos con quienes tenemos un compromiso especial, y eso incluye la asistencia humanitaria y la situación económica del país”, aseguró Price.
Muchos analistas afganos coinciden en remarcar que la actual crisis humanitaria y la inestabilidad que vive Afganistán es fruto en parte del modo deficiente con el que la comunidad internacional, especialmente Estados Unidos, intervino en el país.
“Mi gran crítica es contra la comunidad internacional, (…) que ha puesto al pueblo afgano ante sucesivas crisis y debe encontrar formas efectivas para su solución. De lo contrario, Estados Unidos y la comunidad internacional serán responsables de cualquier catástrofe que ocurra”, dijo a Efe el exdiputado y analista Gulalai Akbari.
EFE