Al entrar a la cancha del Educatión Stadium, las selecciones de Arabía Saudí y de Polonía tenían puestas las miradas, especialmente el once árabe después de ser la sorpresa del mundial al vencer a la Argentina de Leo Messi, y dejarla complicada su clasificación a los octavos de final.
Pero el güión será distinto esta vez, porque Piotr Zielinski y Robert Lewandowski hicieron tocar el suelo del sueño que vivia los sauditas, que en realidad pusieron un ritmo altísimo, presión adelantada, movimiento rápido y fluido del balón, verticalidad.
Los saudíes lo hicieron casi todo bien y tuvieron ocasiones para ponerse por delante. En especial, un disparo de Al Dawasari que tras tocar en un defensa no encontró portería y, sobre todo, una sensacional arrancada de Kanno que, después de apoyarse en Al Brikan, finalizó con un potentísimo golpeo que Szczesny sacó a córner cuando se colaba.
El primer gol viene de un arranque por derecha de Matthew Cash y asisitió a Lewandowski que llegaba solo desde atrás.
El remate del delantero del Barza lo sacó con un pie el portero saudí Al Owais, pero Robert fue rápido a por el rebote, levantó la cabeza y la puso atrás para que Zielinski marcara a placer.
El segundo tiempo arrancó como terminó el primero, el partido se jugaba en terreno de juego de Polonia y las llegadas al área por parte de los atacantes de Arabia Saudí que hicieron destacarse al guardameta polaco Wojciech Szczesny.
Un defensor
Al Maki caro su exceso de confianza con un error al controlar un balón en la frontal de su área con el que le sirvió en bandeja el 2-0 definitivo a Polonia.
Robert Lewandowski fue a la presión, recuperó la pelota y solo ante Al Owais, no perdonó batiéndole por bajo y firmando su primer gol en la fase final de una Copa del Mundo.