La actividad pesquera comercial se ha incrementado en las aguas de la parroquia Manuel Renaud en el municipio Antonio Díaz, Delta Amacuro. Sin embargo, el auge de esta actividad no ha significado desarrollo económico o ingresos importantes para los waraos.
Por el contrario, ha traído graves consecuencias ambientales capaz de desencadenar epidemias en la población warao de Delta Amacuro. Así lo advirtió Mauricio González, un trabajador de la salud comunitaria.
Las zonas con mayor incidencia de esta pesca comercial sin control están ubicadas en parajes solitarios como Boca de Araguabisi, Tobejuba, Baroko Sanuka y Barokoida.
Los pescadores que explotan irracionalmente la aguas de Delta Amacuro provienen de Tucupita, Barrancas y San Félix de los estados Delta Amacuro, Monagas y Bolívar, respectivamente.
Pesca descontrolada y contaminación de las aguas
Los peces muertos y en descomposición flotan en las cercanías de Barakataina, Siaguani, y otras comunidades con conexión directa a través de los ríos Araguao y Araguaimujo.
González denunció que los los pescadores comerciales a quienes denominan “caveros”, explotan la pesca de forma irracional y sin control de nadie. En todos los casos aplican la pesca de arrastre, la cual está prohibida en Venezuela.