Por: Estefani Brito | Carolina Isava. Especial.-
La peligrosa Selva del Darién sigue siendo la ruta que toman cientos de migrantes, entre ellos venezolanos, en busca del sueño americano.
Este viernes, 5 de agosto, el equipo de Qué Pasa en Venezuela recibió imágenes desde el puerto de Necoclí, Colombia. En ellas se aprecian cómo las personas se preparan para iniciar la travesía que los llevará hasta Capurganá, cerca de la frontera con Panamá, donde esperan cruzar esta peligrosa selva.
En el material audiovisual, se pueden observar mujeres embarazadas, adultos mayores y niños, listos para embarcar estas lanchas y emprender un viaje de alrededor de una hora y media hasta llegar a la paradisíaca isla de Capurganá, que se ha convertido en sitio de tránsito de aquellos que desean cruzar de manera ilegal a Panamá.
El valor del pasaje en lancha es de 160.000 pesos colombianos, al que se le suma el costo de la tasa portuaria de 3.300 pesos por persona.
Este jueves salieron 15 lanchas rumbo a Capurganá, con alrededor de 36 personas a bordo cada una. Hasta el mediodía de este viernes, 8 lanchas habían tomado el mismo destinos. Al día, entre 11 y 15 lanchas hace este recorrido.
«Cobra por el exceso de equipaje, cobran por los niños, cobran por todo», dice un migrante venezolano.
De acuerdo a los datos de Migración Panamá, más de 28.000 migrantes venezolanos han cruzado la Selva del Darién en el primer semestre de 2022; una cifra 10 veces más alta a la registrada en 2021, cuando 2.819 venezolanos atravesaron esta arriesgada selva.
Según cifras extraoficiales, al menos 14 migrantes venezolanos han fallecido este años intentado cruzar el Tapón del Darién, y más de 100 se encuentra desaparecidos.
El famoso Tapón del Darién es conocido por es una intransitable zona de junglas, ríos y montañas escarpadas, en la que la hacen vida grupos guerrilleros y paramilitares que se lucran del narcotráfico, contrabando y trata de blancas.
Los migrantes que se arriesgan a tomar esta peligrosa ruta, están a merced de la naturaleza y animales salvajes, además de ser víctimas de asaltos a mano armada y violaciones.