En un mensaje póstumo en video, Frederick de Klerk, el último presidente sudafricano blanco quien murió este jueves a los 85 años, y fuera a menudo criticado por su falta de remordimiento por el apartheid, ofrece una disculpa completa y “de todo corazón”.
“Presento mis excusas, sin ninguna reserva, por el dolor, el sufrimiento, la indignidad y daños que el apartheid infligió a los negros, mulatos e indios en Sudáfrica”, declaró en este video difundido por su fundación.
Asimismo, afirma que tendría muchos comentarios que hacer sobre el estado del país, pero que de manera deliberada optó por un mensaje corto.
“Todavía, a menudo soy acusado por mis críticos de haber continuado de una forma u otra justificando el apartheid”, señaló, reconociendo haber defendido esta forma de segregación durante su juventud, luego como parlamentario e incluso como ministro.
AFP