El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) puso en marcha una potabilizadora portátil de agua en el estado Apure, azotado entre marzo y mayo por combates entre militares y disidentes de las FARC, que beneficiará a 1.950 familias, informó este martes esa entidad.
«Alrededor de 1.950 familias del estado Apure recibirán agua potable, con la puesta en funcionamiento de una planta potabilizadora portátil en el ambulatorio de (el caserío) La Victoria», escribió Unicef Venezuela en su cuenta de Twitter.
Detalló que la instalación de esa planta fue posible «gracias a la contribución de donantes internacionales», puesto que el fondo «trabaja con las autoridades locales» para que los menores y sus familias «vean cumplido su derecho de acceso a agua».
«Así trabajamos, siempre apegados a los principios humanitarios de neutralidad, imparcialidad, independencia y humanidad», concluyó la organización.
Unicef Venezuela publicó varias fotos de la planta, que fue transportada en un remolque e instalada en el lugar por varios trabajadores de la entidad.
Posteriormente, escribieron otro mensaje en el que pidieron que «la ayuda humanitaria que llega a Venezuela a través de agencias, organizaciones de la sociedad civil y otros actores humanitarios no debe ser instrumentalizada con fines políticos».
En la zona en la que fue instalada la planta, fronteriza con Colombia, se registraron combates entre las Fuerzas Armadas y disidentes de las FARC entre el 21 de marzo y el 30 de mayo, lapso en el que perdieron la vida un número indeterminado de miembros de la Fuerza Armada, así como varios integrantes de un grupo de disidentes de las FARC.
Durante los mismos, también fueron secuestrados ocho militares venezolanos, liberados tras permanecer varios días en manos del grupo armado ilegal.
EFE